lunes, 12 de febrero de 2018

Vuelta por el Llac d'Engolasters


El Llac d'Engolasters es un lago formado por una depresión glaciar en la parroquia de Encamp, en el Principat d'Andorra.

Era mi última semana con el turno especial, así que quería aprovechar la semana, por lo que me fui al camping, y el lunes tenía ganas de algo de montaña, por lo que mi elección fue acercarme a Andorra.

Mi primera opción era ascender a la Tossa del Braibal, pero el alto riesgo de aludes y lo que os explicaré a continuación hicieron que cambiaran mis planes.

Bien temprano me acerqué hasta el aparcamiento del Llac d'Engolasters, en la pequeña población de Engolasters, muy cerca de Andorra la Vella.


Aquí me calcé las botas y me puse en la mochila todo el material de invierno, raquetas, crampones, piolet...

Para empezar es tan sencillo como ir a buscar una caseta que se encuentra en el sendero, que resulta res el GR-11.


Este tramo del sendero es muy bonito, muy cuidado y bien protegido en todo momento por una valla de madera.

Por este motivo Andorra es un gran reclamo del turismo de montaña

Vamos avanzando desde el primer momento sobre nieve pero sin necesidad de ponernos las raquetas, ya que se trata de una zona muy concurrida el fin de semana.

Al poco de andar nos encontramos con la primera de las tres fuentes con las que nos encontraremos, la Font de Les Ordigues.

Font de Les Ordigues

Continuando bien protegido por los abetos enseguida llegamos a un bonito túnel que nos sirve para ahorrarnos el subir y bajar un pequeño peñasco.


Cuidado los que sean muy altos

Bonitas estalactitas protegen la entrada

Salimos del túnel y continuamos avanzando hasta dar con la segunda de las fuentes, la Font de les Molleres.

Font de les Molleres

Tras dejar atrás esta fuente, de la que al igual que la primera, no me atreví a probar el agua, cualquiera bebía de ellas habiendo estalactitas al lado del chorro, nos encontramos con un pequeño boulder de unos 6-7 metros de altura, bien protegido del sol, ideal para el verano.

Los tramos más soleados no presentan nieve

Vale la pena pararse a disfrutar del entorno

Al fondo encontramos Andorra la Vella

Curioso boulder en mitad del camino

El boulder está justo al lado de la última de las fuentes, la Font dels Corralets, donde también encontramos un merendero y una especie de refugio.

Font dels Corralets


Aquí el camino adaptado se acaba, y nos toca empezar a avanzar, ahora sí por un sendero más estrecho y vertical.

Ahora ya entramos en materia

Conforme vamos avanzando por el GR-11, en este tramo conocido como el Camí dels Matxos, la nieve va ganando en espesor, pero al estar pisada hay que tener más cuidado de no encontrar hielo que de hundirnos.


El camino siempre está muy bien indicado


Cada vez encontramos más nieve

Tras un rato ascendiendo llegaremos al Coll Jovell.

Coll Jovell

Aquí nos encontramos con una explanada donde encontramos un pequeño claro y varias rutas que salen de él.


Nos tocará avanzar por el sendero de más a la izquierda

En este punto hay que abandonar el GR-11 y coger el sendero que va más a la izquierda, siguiendo las marcas amarillas por la pendiente con mayor inclinación.


Tras un tramo sin casi nieve, de golpe, en las zonas desprotegidas de árboles el espesor de la nieve hace que me hunda hasta casi la rodilla.

En este punto decidí dar media vuelta

Bien es cierto que no me había puesto las raquetas aun, pero estaba en la cota 1.800, además a saber que espesor me encontraría más adelante, no había traza hecha y encima aun me quedaban 800 metros de desnivel, por lo que decidí dar media vuelta, ya que el día siguiente había quedado con Robert para realizar una ruta con esquís de montaña bastante dura y no me quería desfondar hoy.

Voy desandando mis pasos por el sendero hasta llegar a la entrada del túnel, donde a la ida había visto un mirador que había dejado para la vuelta, y fue lo que hice.

Para llegar a este hay una escalera de madera que estaba completamente helada, por lo que tuve que tener mucho cuidado al subir, pero sobretodo al bajar.

El mirador nos ofrede unas vistas impresionantes de todo el valle donde se encuentra Andorra la Vella y el bonito e imponente Bony de Carroi.


Bony de Carroi

Engolasters

Iglesia románica de Engolasters

Desando mis pasos hasta llegar al coche, y como veo que es muy pronto decido darle una vuelta al Llac d'Engolasters.

En lugar de avanzar por el GR, decido ir por un senderillo que sale a la derecha de la carretera marcado con puntos amarillos.

Para variar tenía que liarla, ya que este sendero iba paralelo al lago pero se iba alejando cada vez más, por lo que en cierto punto decidí girar a la izquierda.

Que gozada caminar por bosques así

Para volver al camino "oficial", me tocó bajar por una ladera sin ningún sendero y siempre con una construcción como referencia y buscando el paso más seguro y bien hundido en la nieve.

Por fin llego a la pista que llega hasta un par de restaurantes que se encuentran en la cabecera del lago.


En la misma cabecera de este encontramos una construcción educativa para que los niños vean de lo que es capaz de realizar la fuerza del agua, ya que este lago se utiliza desde principios del siglo XX como central hidroeléctrica.

Curioso artilugio para enseñar a los niños



Este Llac d'Engolasters lo encontramos congelado parcialmente, lo que le da un toque muy bonito.

Llac d'Engolasters

Aquí un sendero va bordeando el lago, bueno, realmente hay dos senderos, uno más alto que el otro para los momentos en los que el lago aumenta su altura en los meses de deshielo.

Curiosas formas que nos deja el hielo

Este sendero es una gozada, muy limpio, con muchas papeleras mimetizadas con el entorno y bien protegido por los abetos, ciertamente los andorranos saben cuidar de su entorno.

Enseguida llego a la presa que han construido para controlar el cauce, pero en lugar de pasar por ella decido ir por un senderillo que da un poco más de vuelta.

Última vista atrás

Al ir por aquí encuentro un pequeño parque de "aventura" con varios puentes y tirolinas.

Ahora toca subir por un camino completamente congelado, por lo que decido avanzar por una especie de sendero mucho más vertical pero donde la nieve no está dura y así evito caídas.

Una vez arriba se llega a un camino asfaltado donde volvemos a dar con el GR-11, y siguéndolo enseguida llegamos al coche y podemos dar por finalizada la ruta.

Todo y no haber podido subir la cima que tenía pensada, el cambio de planes no ha salido mal y he podido descubrir un rinconcito de Andorra que no conocía y que me ha enamorado, seguro que volveré por aquí, ya sea para subir la cima pendiente como para pasar el día disfrutando de la naturaleza comiendo unos bocadillos.

A continuación os hago un pequeño resumen de los números de la ruta:
  • Tipo de ruta: Lineal
  • Dificultad técnica: Fácil
  • Dificultad física: Fácil
  • Distancia: 8,65 Km
  • Punto más alto: 1.820 m
  • Punto más bajo: 1.580 m
  • Desnivel positivo: 360 m
  • Desnivel negativo: 360 m
  • Desnivel acumulado: 720 m
  • Cimas ascendidas: 0
  • Tiempo empleado: 2 horas 23 minutos
  • Tiempo en movimiento: 1 horas 30 minutos
  • Velocidad media: 3,23 Km/h
  • Ritmo: 18:35 min/Km

Os adjunto el track de Wikiloc de la ruta: Llac d'Engolasters

Saludos!!!

6 comentarios:

  1. Hola David.

    Muchas veces los Pirineos no nos permiten subir a sus cumbres, y mucho más en invierno. Pero por suerte siempre podemos encontrar opciones alternativas interesantes en sus cotas más bajas, como en este caso este bonito Llac d'Engolasters, que lo encontraste que parecía una pista de patinaje ;-)
    Estaremos atentos a la esquiada del día siguiente con Robert.

    Un abrazo.

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    1. Hola Dani,

      Siempre es bueno tener un plan B cuando se intenta hacer una cima en invierno, y por suerte en esta ocasión este bonito lago lo facilitó mucho.
      A ver cuando te vienes por aquí, que queda pendiente la ruta que tu ya sabes.

      Un abrazo.

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  2. ¡Hola, David! Pues a pesar de no haber podido realizar la ruta en su totalidad, la variante que te ha salido no ha quedado nada mal. Además, como decimos, esa nieve le da un plus que por aquí abajo vemos muy poco. Ese rinconcito descubierto todo un lujo.
    Un abrazo.

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    1. ¡Hola Emilio!

      No siempre nos salen las rutas como queremos, por eso hay que saber como adaptarse en todo momento.
      Por suerte tengo muy cerca la nieve y todos los inviernos puedo disfrutar de ella, aunque vosotros este año también la habéis tenido muy cerquita.

      Un abrazo.

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  3. Hola David
    Si es que lo quieres todo, no paras quieto ni un momento jajaja.
    Hoy raquetas, mañana esquí de montaña, seguro que por la tarde tenías una partida de bolos o algo de eso jajaja.

    Lo que esta claro que con cima o sin cima la ruta esta por Andorra está guapa y tú que lo tienes mas cerca que nosotros seguro que volverás.

    Un abrazo
    Jose
    TROTASENDES BENICALAP

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    1. Hola Jose,

      Que lo voy a hacer, soy un culo inquieto... jajaja
      Aunque no pude hacer cima esta vez, te puedo asegurar que volveré, ya tengo lista una ruta circular para primavera muy guapa... jejeje
      Ciertamente tengo mucha suerte de tener Andorra tan cerca, este pequeño país es una delicia para los amantes de la montaña, a la que tengáis unos días libres no dudéis en ir, os encantará.

      Un abrazo.

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